OBISPO Y TRES PASTORES QUE ASISTIERON A MASIVO EVENTO EN PAINE DIERON POSITIVO
Alerta por contagio de Covid-19 en conferencia nacional que reunió a 300 líderes de iglesia evangélica
30.03.2020
Hoy nuestra principal fuente de financiamiento son nuestros socios. ¡ÚNETE a la Comunidad +CIPER!
OBISPO Y TRES PASTORES QUE ASISTIERON A MASIVO EVENTO EN PAINE DIERON POSITIVO
30.03.2020
El obispo de la Iglesia Metodista Pentecostal (IMP), Mario Salfate, está hospitalizado por Covid-19. Él y otros tres pastores dieron positivo después de que concurrieron a un evento que reunió a 300 líderes de esa corriente evangélica que tiene más de cien templos en el país. La conferencia se inició el lunes 16, cuando aún se permitían reuniones de hasta 500 personas, pero ese mismo día partió la Fase 4, que prohibió citas con más de 200 concurrentes. El evento debía cerrarse el jueves 19, pero el martes 17 se dio por terminado. Autoridades de la iglesia dicen que al día siguiente suspendieron todos sus servicios a nivel nacional y que los asistentes a la conferencia entraron en cuarentena, pero no se sabe si en ese lapso encabezaron ceremonias.
El lunes 16 de marzo, muy poco antes de que el gobierno decretara Fase 4 en el país producto de la pandemia de Coronavirus, cientos de pastores y pastoras de la Iglesia Metodista Pentecostal de Derecho Privado (IMP), se reunieron en una multitudinaria conferencia en Paine (Región Metropolitana). El término abrupto de esa reunión al día siguiente —inicialmente estaba programada para cuatro días, hasta el jueves de esa semana— no fue suficiente como medida preventiva. Al menos cuatro asistentes al evento, entre ellos el máximo líder a nivel nacional de la IMP, obispo Mario Salfate Chacana (67 años), arrojaron positivo con Covid-19.
Lo complejo es que los más de 300 pastores que asistieron a esa conferencia evangélica retornaron a sus respectivas ciudades de origen (la IMP tiene más de un centenar de templos a lo largo de todo Chile) el martes 17 de marzo y recién el jueves de esa semana se confirmó el primer caso de Coronavirus que afectaba a uno de los asistentes a la reunión de Paine. Desde la dirección de la IMP indicaron a CIPER que, por precaución, el miércoles 18 suspendieron todos sus servicios religiosos a lo largo del país y que apenas supieron del primer contagio informaron al Minsal la nómina de asistentes y estos quedaron en cuarentena.
No queda claro si en ese lapso (entre el martes 17 y el miércoles 18), algunos pastores celebraron o participaron en oficios religiosos o reuniones ya de regreso en sus localidades. Todos los asistentes tienen cargos de responsabilidad en sus respectivos templos a nivel regional.
El evento había sido organizado con varios meses de anticipación. Se enviaron cientos de invitaciones y, pese a algunos contratiempos de última hora, se había dado finalmente con el espacio indicado. El 28 de febrero ya estaba todo organizado y así fue informado a los líderes y pastores de IMP a través de una comunicación por escrito: la Conferencia N°111 de la IMP se iniciaría el lunes 16 de marzo, se extendería por cuatro días y, en vez del Hotel O’Higgins de Viña del Mar, el lugar de la reunión sería el Complejo Angostura, centro de eventos ubicado cerca de la Ruta 5 Sur en Angostura de Paine.
“Dado los diferentes disturbios en la ciudad de Viña del Mar, en específico los ataques que sufriera el Hotel O’Higgins, que fuera la sede de nuestra 111° Conferencia, y la decisión del mismo establecimiento de cerrar sus puertas al público, es que nuestro Obispo y algunos directores han tenido que ver otras opciones para desarrollar esta convocatoria tan importante para nosotros”, se lee en el comunicado.
Pasado el mediodía del 14 de marzo, a través de una vocería del ministro de Salud, Jaime Mañalich, el gobierno había anunciado el inicio de la fase 3 para nuestro país por de la pandemia de Coronavirus. A esa fecha se contabilizaban 61 casos de Covid-19, 40 de ellos en la Región Metropolitana. Entre otras medidas, la autoridad sanitaria prohibió todos los eventos y convocatorias de más de 500 asistentes.
A partir de ese día, la inminencia de la fase 4 era ya una realidad. El evento, sin embargo, continuaba en pie y seguía siendo anunciado por todas las redes sociales de la iglesia. “Estamos a menos de un día, nos comenzamos a preparar para realizar estas conferencias. Durante la tarde estaremos informando desde el Complejo Angostura donde se llevarán a cabo estos 4 días de bendición para todo el pastorado de nuestra corporación”, se lee en una publicación por redes sociales de la IMP el domingo 15 de marzo, cuando ya se contabilizaban oficialmente 75 contagios en el país (54 en la Región Metropolitana).
Un usuario respondió a esa publicación haciendo un llamado a que como medida preventiva se suspendiera el evento si contaba con más de 500 personas: “muchos pastores son de la tercera edad y arrastran a mucha gente en sus iglesias”.
Desde la organización de la conferencia, indicaron a CIPER que cuando se decretó fase tres, decidieron reducir la cantidad de asistentes a la conferencia para cumplir con las restricciones impuestas por la autoridad sanitaria.
A las 9 de la mañana del lunes 16 de marzo, ya habían llegado al Complejo Angostura en Paine varios miembros de la IMP. Solo una hora y media más tarde, cerca de las 10.30 am, el gobierno decretó el inicio de la fase 4, con 156 contagios reportados (123 solo en la Región Metropolitana).
Las restricciones se endurecieron: cierre de fronteras, cuarentena en Caleta Tortel, anuncio de multas y penas de cárcel por incumplimiento de cuarentena, suspensión de clases y prohibición de eventos públicos con más de 200 personas.
Para entonces, en Angostura de Paine ya se habían acreditado presencialmente al menos 300 pastores y pastoras, que llegaron desde distintos puntos del país para participar de la Conferencia N°111 de la IMP.
La Fase 4 implicó que la organización de la conferencia decidiera acortar los días de estadía en el Complejo Angostura, la que estaba inicialmente programada hasta el jueves 19 de marzo. Uno de los coordinadores indicó a CIPER que producto de lo anterior, se dio término al evento al día siguiente, el martes 17. Tras el almuerzo de ese día, dice, todos los asistentes se devolvieron a sus respectivas ciudades. Fuentes consultadas por CIPER indicaron que a la conferencia de la IMP llegaron pastores y pastoras desde varios puntos de Chile.
La Iglesia Metodista Pentecostal de derecho privado cuenta con más de 100 templos matrices repartidos desde la región de Arica y Parinacota hasta la de Magallanes. Solo en la Metropolitana, la IMP tiene 25 templos con presencia en comunas como Puente Alto, San Bernardo, Padre Hurtado, Buin, Paine, Quinta Normal, Recoleta, La Pintana, El Bosque, Lo Espejo y Cerro Navia, entre varias otras.
Pocos días después del término de la conferencia, se detectó un primer caso entre los asistentes a la conferencia. El jueves 19 de marzo, el examen de un pastor salió positivo. Casi simultáneamente, a otros dos pastores que estuvieron en Paine también se les detectó Coronavirus.
La preocupación entre el pastorado de la Iglesia Metodista Pentecostal caló aún más hondo cuando el propio obispo y máximo líder de esa denominación religiosa, también dio positivo. Mario Salfate Chacana se encuentra actualmente en la UCI del Hospital San Juan de Dios de Los Andes (Región de Valparaíso) y su situación es de gravedad. Así lo ha informado públicamente la IMP que ha hecho llamados a sus feligreses y también a los líderes de los cultos agrupados en la Unión de Iglesias Pentecostales de Chile (UNIPECH), para sumarse a cadenas de oración por su salud, la que se complicó producto de una diabetes, antecedentes de hipertensión y una fibrosis pulmonar.
Uno de los llamados a orar por la salud del obispo Salfate fue realizado por la propia esposa del líder de la IMP, la diaconisa Mariana Sandoval, a través de un mensaje de audio de WhatsApp enviado el jueves 26 de marzo a pastores de distintas denominaciones religiosas pentecostales.
Versiones recientes recogidas por CIPER indican que el estado de salud del obispo Mario Salfate habría mostrado cierta mejoría en los últimos días. Los otros tres pastores afectados por COVID-19 —entre ellos el yerno del obispo Salfate— se encontrarían en buen estado de salud.
CIPER se contactó con el vicepresidente de la Iglesia Metodista Pentecostal de derecho privado, el pastor Luis Saavedra Lobos. Saavedra, que sucede en la línea jerárquica de la IMP al obispo Mario Salfate, indicó que apenas se enteraron del primer caso —con posterioridad al término del evento masivo— enviaron la lista de todos los asistentes a la conferencia en Angostura de Paine al Ministerio de Salud (Minsal) y que estos inmediatamente se pusieron en cuarentena.
Afirma también que no tiene registro de más casos a los ya mencionados (el obispo Salfate y otros tres pastores asistentes). Consultado por si la IMP no consideró suspender el evento en vista de las restricciones de la Fase 3 en curso, Saavedra contestó que el evento se ajustó completamente a la normativa, ya que cuando el lunes 16 de marzo se decretó Fase 4 con restricción de reuniones hasta 200 personas, los cerca de 300 asistentes estaban divididos en dos grupos —de hombre y de mujeres— de cerca de 150 personas cada uno y que no tuvieron contacto entre sí.
Pese a que el material promocional de la Conferencia N°111 de la IMP sugiere que la invitación al evento contaba con la participación de invitados de al menos ocho países (quienes pudieron haber ingresado antes del cierre de las fronteras), el pastor Saavedra asegura que ningún pastor viajó desde el extranjero y que los asistentes de otras nacionalidades que sí participaron de la reunión residen en Chile desde hace tiempo.
Respecto del peligro de que los y las pastoras que asistieron a Paine hayan continuado con sus actividades y ceremonias en sus propias localidades y en contacto con feligreses, el pastor Saavedra señala que el miércoles 18 de marzo la dirección de la IMP suspendió los servicios religiosos de todos sus templos a lo largo del país con el objetivo de evitar contagios.
En un comunicado redactado por la dirección de la IMP poco después de la detección del primer caso del pastor contagiado con Coronavirus, junto con informar a su comunidad sobre las medidas administrativas que se tomaron ante la emergencia, se señala:
“Lamentamos que estemos en esta situación, nunca ha sido la intención de nuestras autoridades el vernos involucrados en esto, se ha tratado de hacer lo mejor de acuerdo con las normas establecidas en esos momentos, respetando nuestras autoridades y si en algo no se procedió con prudencia, no fue un acto intencional, por lo que pedimos a Dios que nos ayude a hacer cada vez de mejor manera las cosas” (ver comunicado).
El caso del contagio en la masiva reunión de la Iglesia Metodista Pentecostal de Derecho Privado en Paine, se suma al brote de Coronavirus en el sector Boca Sur en la comuna de San Pedro de la Paz (Región del Biobío), cuyo origen habría sido una ceremonia en una iglesia evangélica de esa localidad. Tras conocerse ese caso, la autoridad de Salud impuso un cordón sanitario en esa comuna.
Los casos de la IMP en Paine y de la iglesia evangélica en San Pedro de la Paz no son los únicos. En vista del rápido aumento de casos de COVID-19 en la ciudad de Osorno (Región de Los Lagos) en los últimos días, la intendenta (s), Leticia Oyarce, apuntó a otro culto evangélico como uno de los focos de contagio.
Parte del mundo evangélico no solo ha estado atento a los coletazos de la concurrida reunión que sostuvieron cerca de 300 pastores de la Iglesia Metodista Pentecostal de Derecho Privado en Paine. Solo dos días antes del inicio de ese evento y a pocos minutos de que el gobierno decretara el inicio de la Fase 3 producto de la pandemia de Covid-19, tuvo lugar otra ceremonia que no pasó inadvertida entre varios de los líderes evangélicos cercanos a la corriente pentecostal (la más masiva en Chile).
El sábado 14 de marzo, el ex obispo de la Catedral Jotabeche 40 (Primera Iglesia Metodista Pentecostal de Chile), Eduardo Durán Castro (77 años) —protagonista de uno los mayores escándalos recientes en el mundo evangélico y que detonó una investigación de la Fiscalía en su contra por presunto lavado de activos— contrajo matrimonio con su pareja desde al menos 2017, Ruth Sepúlveda Loyola (59 años).
La ceremonia, indicaron a CIPER personas que conocieron detalles del evento, tuvo lugar en su domicilio de Isla de Maipo y a ella habrían concurrido cerca de 20 invitados. El certificado de matrimonio indica que el acto civil quedó inscrito en Talagante (provincia en la que se encuentra Isla de Maipo) y que se realizó al mediodía.
Este es el segundo matrimonio del defenestrado obispo Durán Castro. Durante cuatro décadas estuvo casado con Raquel Salinas (también diaconisa de Jotabeche 40) y luego se emparejó con Alexia Fredes, una ex integrante del coro de la iglesia que el obispo presidía.
En 2017 un nuevo capítulo sentimental del entonces obispo Durán se hizo público y generó revuelo en el conservador mundo evangélico: su relación con Ruth Sepúlveda, también miembro del coro de Jotabeche 40 y hermana del líder de la Primera Iglesia Metodista Pentecostal en Arica, el pastor Teobaldo Sepúlveda.
Las relaciones amorosas de Eduardo Durán Castro —ventilados por la prensa y hasta por matinales de televisión— terminaron por generar un quiebre de proporciones al interior de la multitudinaria comunidad evangélica que presidía.
A ese “quiebre moral”, se sumó la crisis de confianza generada luego que el diario La Tercera revelara el abultadísimo patrimonio —ocho vehículos y 12 propiedades— y la cómoda vida que llevaba el ex obispo Durán, encargado de administrar los diezmos de la su iglesia. Una indagación del Ministerio Público detectó posteriormente movimientos por casi $3.500 millones en sus cuentas corrientes.
A fines de abril del año pasado, Eduardo Durán fue destituido de su cargo por representantes de Jotabeche 40. Sin embargo, un puñado de fieles y colaboradores lo siguen hasta hoy en celebraciones religiosas que realiza en su propia parcela de Isla de Maipo.
El 23 de marzo pasado, de hecho, ofició una ceremonia vía streaming y con mascarilla acompañado de dos pastores.
“Cumpliendo con lo ordenado por la autoridad, en estos momentos como ustedes ven me encuentro con esta mascarilla, pero cuando se trata de dirigirnos a Dios todopoderoso y con el debido respeto, nos sacamos la mascarilla porque sabemos que Dios nos escucha y nos oye”, dice en un registro audiovisual (ver aquí).