¿Qué han hecho las regiones para aplanar la curva? Sería bueno saberlo en estos momentos en que la Región Metropolitana pelea contra el COVID-19. Pero no lo sabemos, dice el autor de esta columna, porque la mayor parte del financiamiento para investigar y de los académicos está en la capital. Esto produce “un grupo de investigadores muy homogéneo, con visiones muy similares y con una tendencia, casi enfermiza a mirarse el ombligo. El centralismo de la academia no es solo malo para el país, sino también para los capitalinos, porque los hace ciegos a otras realidades de las cuales pueden aprender y nutrirse”.
La expresión “La batalla de Santiago” ha sido acuñada para referirse al incremento de contagios con COVID-19 que ha experimentado la Región Metropolitana (en adelante RM). Sin embargo, esta batalla se comenzó a pelear mucho antes y no es patrimonio exclusivo de la capital. La frase “Chile no está aplanando la curva” no es del todo cierta, varias regiones han pasado su peak de contagios y han comenzado a reducir el número de casos activos[1].La batalla se está dando desde antes y, por ahora, con buenos resultados. ¿Qué han hecho las regiones para aplanar la curva? No lo sabemos, la academia no se ha interesado, hasta ahora, en estudiar el éxito de las estrategias implementadas en el manejo de la pandemia en regiones.
Hay dos razones que podrían explicar este desinterés. Primero, RM concentra al 58% de los investigadores con doctorado (Censo 2017), es decir, la mayoría de las personas con entrenamiento en investigación se agrupan en un mismo lugar y, mayoritariamente, este grupo focaliza sus esfuerzos y tiempo en estudiar el lugar que habitan: la Región Metropolitana.
Segundo, históricamente el financiamiento estatal en investigación se ha concentrado en universidades y centros de investigación ubicados en la capital de Chile. Estos dos aspectos llevan a construir un grupo de investigadores muy homogéneo, con visiones muy similares, y con una tendencia, casi enfermiza, a mirarse el ombligo. El centralismo de la academia no es solo malo para el país, sino también para los capitalinos, porque los hace ciegos a otras realidades de las cuales pueden aprender y nutrirse.
Dos de las regiones más pobres (Araucanía y Ñuble) y una de las más aisladas (Magallanes) están saliendo adelante, ¿por qué la capital no podría hacerlo?.
Como planteaba anteriormente, la frase “Chile no está aplanando la curva” no es estrictamente cierta, las regiones de la Araucanía, Ñuble y Magallanes, las cuales tienen el mayor número de fallecidos por cada 100 mil habitantes, han ido dando pasos importantes para controlar la pandemia. Pero ¿por qué usted no se había enterado de esto?
La razón es sencilla, los medios de comunicación (ver Covid-19 y el centralismo de los medios de comunicación) y los investigadores se han focalizado en describir lo que sucede, mayoritariamente, en la región metropolitana.
Además, y casi por costumbre, uno tiende a pensar que lo que ocurre en Santiago es representativo de lo que sucede en el resto del país. El debate sobre la curva de contagios ilustra ese error. La curva que usted ha visto en televisión o en los diarios y que muestra que Chile no está aplanando la curva es representada en la siguiente figura. El Gráfico 1 muestra la evolución de los casos activos de COVID19 en todo el país (se incluyen todas las regiones).
Gráfico 1: La evolución de los casos activos en Chile
Fuente: Estimaciones realizados por el autor utilizando datos del MINSAL entre el 03 de marzo al 13 de mayo.
Sin embargo, este análisis incorpora información de las distintas zonas del país e integra a las regiones de Arica, Maule y Magallanes como si fueran casos comparables entre sí. Pero ¿es lo mismo vivir en Arica, Monte Patria, Mehuin, Chile Chico, ¿Selva Oscura (mi localidad de origen) o Puerto Natales? Por supuesto que no, el problema es que, al usar datos a nivel nacional, RM arrastra al resto de comunas (de menor población) hacia su tendencia e invisibiliza las diferencias regionales.
Como se puede ver en el Gráfico 2, cuando se separa a la Región Metropolitana y las tres regiones con mayor tasa de fallecidos por Covid-19, las diferencias son bastante claras. Araucanía, Ñuble y Magallanes ya han pasado el peak de casos activos y van a la baja. En cambio, la Región Metropolitana va en alza. Queda claro que hay regiones que han logrado, al menos parcialmente, aplanar la curva. ¿Cuál es el secreto?
De acuerdo a los datos de Google Community Mobility Report, Magallanes es la región que registra una mayor respeto por el distanciamiento social, en comparación con la región del Ñuble, Araucanía y Metropolitana, los datos muestran una disminución de personas comprando en tiendas (-74%), farmacias y supermercados (-54%), visitando parques (-69%) o saliendo en sus vehículos (-79%).
Para descentralizar el conocimiento, la academia debería responder ¿qué podemos aprender de las regiones? ¿Qué errores debemos evitar y qué aciertos podemos replicar? Este debate no es abstracto, pues la respuesta a estas preguntas puede tener enormes implicancias para la mitigación de la pandemia.
Además, las autoridades de salud han adaptado el hospital de Punta Arenas para la atención de pacientes COVID-19, reorganizaron turnos y aumentaron el número de camas UCI (ver “La receta de Punta Arenas”). En la Araucanía las cosas no arrancaron bien, la seremi de salud, quien debía poner en práctica los protocolos sanitarios, los incumplió y envió a la plana mayor de la región para la casa: intendente, 7 seremis y varios jefes de servicio tuvieron que permanecer en cuarentena (ver el siguiente link).
Sin embargo, la región reacomodó el rumbo aumentando su capacidad de testeo con dos laboratorios habilitados en la Universidad de la Frontera. Temuco, después de permanecer casi 5 semanas en cuarentena total, comenzó a reducir el número de casos activos.
Gráfico 2
La evolución de casos activos en las regiones del Ñuble, Araucanía, Magallanes y Región Metropolitana.
Fuente: Estimaciones realizados por el autor utilizando datos del MINSAL entre el 03 de marzo al15 de mayo.
En síntesis, el problema es que la concentración de capital humano (número de académicos) y económico (financiamiento estatal) en la Región Metropolitana, genera una especie de “monopolio del conocimiento”. Esto invisibiliza el conocimiento y las experiencias de zonas geográficas que están fuera de los límites urbanos de la región metropolitana, y la pandemia ha evidenciado esta carencia. Después de más de dos meses del primer caso en Chile (03 de Marzo), no tenemos claridad de lo que sirve o no para mitigar la expansión de la pandemia, aun cuando existen importantes avances en regiones del sur del país.
Recordemos que dos de las regiones más pobres (Araucanía y Ñuble) y una de las más aisladas (Magallanes) están saliendo adelante, ¿por qué la capital no podría hacerlo? Para descentralizar el conocimiento, la academia debería responder ¿qué podemos aprender de las regiones? ¿Qué errores debemos evitar y qué aciertos podemos replicar? Este debate no es abstracto, pues la respuesta a estas preguntas puede tener enormes implicancias para la mitigación de la pandemia. Pero la costumbre de mirarse el ombligo puede llevar a no ver el camino, a tropezar, es la tentación del centralismo.
* Mis agradecimientos a Lindsey Carte, Sandra Botero, Santiago Téllez, Luis Ríos y Marcelo Somos por sus comentarios y sugerencias.
NOTAS Y REFERENCIAS
[1]Casos activos: personas vivas confirmadas con COVID-19 cuya fecha de inicio de síntomas en la notificación es menor o igual a 14 días a la fecha del reporte actual (considera solo vivos).
Este artículo es parte del proyecto CIPER/Académico, una iniciativa de CIPER que busca ser un puente entre la academia y el debate público, cumpliendo con uno de los objetivos fundacionales que inspiran a nuestro medio.
CIPER/Académico es un espacio abierto a toda aquella investigación académica nacional e internacional que busca enriquecer la discusión sobre la realidad social y económica.
Hasta el momento, CIPER/Académico recibe aportes de cinco centros de estudios: el Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (COES), el Centro de Estudios Interculturales e Indígenas (CIIR), el Instituto Milenio Fundamentos de los Datos (IMFD), el Centro de Investigación en Comunicación, Literatura y Observación Social (CICLOS) de la Universidad Diego Portales y el Observatorio del Gasto Fiscal. Estos aportes no condicionan la libertad editorial de CIPER.
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Interesante su reflexión pero quiero referirme específicamente a la siguiente frase.
" ¿Qué han hecho las regiones para aplanar la curva? No lo sabemos, la academia no se ha interesado, hasta ahora, en estudiar el éxito de las estrategias implementadas en el manejo de la pandemia en regiones."
Soy académico de la universidad de la Frontera, y me siento ofendido cuando usted dice que no nos hemos interesado, porque no es cierto, hemos dado una dura batalla por los datos locales los cuales sistemáticamente han sido negados por las autoridades. Nosotros conformamos un grupo de académicos trabajando desde los primeros días de la pandemia y hemos desarrollado un arduo trabajo en presentar proyectos de investigación pero el problema no ha sido falta de interés sino por falta de acceso a los datos que deberían ser amplios y públicos, lamentablemente los trabajos que se han realizado con la información oficial han desembocado en predicciones muy equivocadas que no permiten la toma de decisiones. Por que los pocos datos que son públicos son básicos y superficiales, y no permiten los análisis mas profundos que se requieren, a pesar que las autoridades han reconocido la necesidad de procesar los datos, estos siguen cautivos sin que nosotros podamos hacer nuestro trabajo que seria sin duda un aporte para la toda de decisiones en políticas publicas locales y aprendizajes para el resto del país.
Patricia Poblete Arellano | 22.05.2020
Soy de la octava región.En particular de la ciudad de Los Angeles.Durante estos dos meses habíamos tenido muy pocos casos,pero esto ha ido cambiando debido a un importante brote en la vega fe nuestra ciudad,importado de la ciudad de Stgo.Además algunos casos de Laja.
Debo decir que el óptimo manejo de.nuestro servicio de salud ha sido clave en la contención de la pandemia. Ademà s tenemos UCI de primer nivel en el complejo hospitalario Dr.Victor Ríos Ruiz. Gracias a la excelente calidad de nuestros equipos intensivistas se ha apoyado a pacientes de la Araucanía,y ahora de Stgo.
Bernardo González | 22.05.2020
Personalmente lo veo más simple en las regiones pobres señaladas apenas se dispararon los contagios se aplicó cuarentena total, lo que No se hizo en la RM., cuarentenas parciales. Sumado a que la gente de provincia por no se que causa a investigar responde mejor a las instrucciones centrales
Leoncio Flavio Rojas Rosas | 22.05.2020
Yo veo dos niveles distintos de análisis en esta columna que están entremezclados y confusos. La actividad científica que se hace en la RM y el impacto que tiene en regiones del Covid-19 una vez que se saca la RM de los datos. La pregunta: Qué han hecho las regiones para aplanar la curva?
Ya está contestada. La cuarentena pues. Ese es el aporte y está por verse ahora en la RM si está medida tan extrema resulta. Los datos que se usan son agregados entonces los eventos, (número de contagios nuevos, fallecimientos etc) deben ajustarse por edad sexo y etnia) porque hay distintas distribuciones por edad, en las regiones. La Araucanía tiene mayor componente de ruralidad y densidades poblacionales.
Lo único que me queda claro de la columna es la cuarentena que no afecte tener efectos para reducir el número de casos activos.
Respecto del hacer ciencia en Regiones. No tiene nada que ver con la pandemia. Ese es otro tema que conozco muy de cerca en la UFRO 1996-2002 bajo el rectorado de un ciudadano alemán y que terminó en los Tribunales de Justicia. Pero ese es otro tema.
Leoncio Flavio Rojas Rosas,Ph.D.
Doctor en Sociología,Duke University '91
Post-doctorado en Bioestadística, Gillings School of Global Public Health, University of North Carolina at Chapel Hill '08
Claudio Salinas O | 21.05.2020
Todas las autoridades de gobierno, además de diputados, senadores, y hasta el alcalde, están escondidos. Da la cara la Seremi de Salud, por todos.
Juan Carlos Toloza Cid | 21.05.2020 | Socio/a 3 años y 3 meses
MIGUEL ANDRADES ALCÃZA, me imagino que debes ser de Santiago, por la ignorancia y tu falta de conocimiento respecto de la calidad de personas y profesionales que habemos en distintos rubros del quehacer.
También puede ser que simplemente, no estas informado o no tengas comprensión de lectura.
Jorge Salvo | 21.05.2020
Los pobres de Ñuble y de La Araucanía son en su gran mayoría los mapuche, así como los de Magallanes son chilotes, también mapuche. La razón parece obvia: son las tres regiones donde la mayoría de los pobres tienen una visión del mundo y de la vida. diferente a los de Santiago. Es esa visión colectiva del pueblo mapuche lo que les ha permitida mantener mantener cuarentenas, distancia social y sobrellevar la escasez
Harold | 21.05.2020
Santiago es un enclave dentro de lo que conocemos por Chile.
El autor no se refiere a ninguna política de salud implementada localmente fuera de Santiago, porque NO EXISTEN. La centralización y la distribución geográfica esta vez ha sido favorable a las regiones. Estamos mejor por defecto
Sergio Zavala | 21.05.2020
Porque si las regiones Jan podido aplanar la curva castigan a los adultos mayores a permanecer enclaustrados en casa, también necesitamos de espacio y no para anexar paseando en los mall si no más bien desplazarnos en nuestros vehículos, contemplando el mar,paisajes y de venir de la coudad
Carlos Gonzalez Guzman | 21.05.2020
Yo lo verîa de manera mâs simple. Ciudades donde se implementô una cuarentena y lugares donde no. Por otra parte, en todos los paîses hay grandes diferencias entre diferentes regiones o provincias. Y eso por razones que van desde la densidad poblacional hasta el azar.
Miguel Andrades Alcázar | 20.05.2020
Solo una pregunta, donde están todos estos famosos expertos en la materia , si desde que comenzó el contagio , no veo las posibles soluciones de estos famosos o importantes eminencias de la ciencia , puro blufeo, le recomiendo que escriban historias futuristas o de mitología ahí esta su futuro , estamos cada vez peor con el contagio y no se ven sistemas para mitigar el contagio , acá no tenemos eminencias por vocación en esa área, saludos
Socio/a 3 años y 3 meses
